VIRUS DEL ÉBOLA

¿QUÉ ES EL ÉBOLA?



El Ébola es una enfermedad infecciosa viral aguda que
produce fiebre hemorrágica 
y es
una de las enfermedades más letales para el hombre, con una tasa de mortalidad del 25 al 90%.

Un
virus es por definición un microorganismo de estructura simple, constituido por
ácido nucleico (ADN o ARN) y proteína, que necesita multiplicarse dentro de las
células vivas y es causa de numerosas enfermedades
El virus del ébola daña las células endoteliales y la
coagulación, provocando en los pacientes un shock hemorrágico que implica una
gran  pérdida  de sangre.
¿CÓMO
SE CONTAGIA?

El
virus del Ébola se contagia entre humanos por el contacto directo con la sangre u otros
fluidos o secreciones
 corporales (saliva, semen,
orina, sudor, heces…) de una persona
infectada y que presente ya síntomas de la enfermedad o de
cadáveres de personas  infectadas.
No son contagiosos durante el periodo de incubación (hasta la aparición de los síntomas). Este periodo puede durar hasta un máximo de 21 días.
También
pueden ser objetos causantes de contagio todos aquellos contaminados por haber
estado en contacto con un paciente infectado (ropa, sábanas, agujas…).
No
se transmite ni por el agua, ni por el aire.
El
riesgo de infección se reduce evitando el contacto con sangre o fluidos
corporales potencialmente contaminados.

SÍNTOMAS:

– Fiebre alta.
– Debilidad corporal.
         – Dolor muscular, de cabeza y de
garganta.
         – Hemorragias internas y externas.
– Vómitos, diarreas.
– Erupción cutánea.
– Alteración de funciones renal y
hepática.

TRATAMIENTO:

A día de hoy no existe un tratamiento
específico
para este virus, por lo que solo se pueden tratar sus síntomas
como la fiebre, y se deben ingerir abundantes líquidos para evitar la
deshidratación y guardar reposo.