EL GINSENG, IDEAL CONTRA EL CANSANCIO FÍSICO E INTELECTUAL 

El
ginseng es una planta vivaz cuya raíz posee una gran reputación en China por
sus propiedades tonificantes y afrodisíacas.
Su uso
tradicional, reservado al emperador y a los importantes señores feudales, se
remonta a la antigüedad.
En
occidente experimentó un gran éxito a partir del siglo XVIII. Su nombre, “flor
de la vida”, alude a los beneficios que proporciona esta planta, atribuidos
especialmente a la presencia de ginsenósidos.
Composición y propiedades:
Hay que
esperar hasta que la planta haya alcanzado al menos los 6 años de edad para
recolectar su raíz. Cuanto más rica sea ésta en ginsenósidos, nunca en
porcentaje inferior al 4%, más eficaz resultará.
Además de
estas sustancias, posee otras que desempeñan un papel importante como pueden
ser vitaminas del grupo B, vitamina C, aceites esenciales o aminoácidos.
Las
investigaciones clínicas sobre el ginseng han confirmado su acción tónica y
revitalizante que produce una mejora tanto del estado físico como del
intelectual en personas jóvenes y también en las más mayores.
Así
mismo, ejerce un efecto positivo sobre la disminución del nivel del colesterol,
de los triglicéridos y del azúcar en sangre. El ginseng es un extraordinario
adaptógeno (que ayuda al cuerpo a adaptarse a su entorno).
Por
todas estas sustancias que posee el ginseng, ésta planta esta indicada
principalmente en las siguientes patologías o alteraciones:
–        
Astenia.
–        
Fatiga en general.
–        
Estrés.
–        
Agotamiento físico

–        
Agotamiento intelectual.